Acompaña a su lado por la primera dama Faviola Yáñez, Fernández inició la ceremonia en Olivos, ya que no pudo viajar a Rosario por recomendación de la Unidad Médica Presidencial por el numeroso crecimiento de casos de coronavirus en el AMBA.
Señalando que “es un día especial, un 20 de junio diferente, recordamos a alguien como fue Manuel Belgrano. La pandemia nos obliga tomar distancia. Este acto debería hacerse en Rosario, capital de la Bandera”, lamentó el primer mandatario.
Luego se explayó contando que una niña le escribió un tuit porque quería hacer la promesa de la bandera, pero fue una carta lo que lo llevó a decidir un acto virtual con promesa de lealtad a la Bandera por parte de niños y niñas de diferentes provincias del país.
En vivo se realizó una videoconferencia con 31 promesantes a los que nombró uno por uno como tomando distancia.
Esta iniciativa fue de Celina, una niña de Neuquén que escribió y envió una carta al Presidente a través del correo. La respuesta a la carta, fue organizar esta modalidad de promesa virtual.
Seguido a presentarlos y saludarlos, en un acto de protocolo, Alberto Fernández le tomó el juramento a la Bandera a los niños y niñas, lo que hizo estallar el aplauso de reducido grupo de asistentes en el lugar. Cerrando la ceremonia con los escolares, pasó a la Banda de Regimiento de Patricios que interpretó el ‘Salve Argentina’.
Luego Alberto Fernández recordó a Manuel Belgrano destacando que era hijo de inmigrantes que se educó en España instruido en economía y comercio; y que fue influido por la Revolución Francesa. Recordando que fue miembro de la Junta en 1810 trabajando por una Argentina libre e independiente; que se hizo soldado luchando y siendo ayudado por San Martín y Martín Güemes, destacados próceres de nuestra historia. Con mención a la creación de a Bandera Argentina, marcó el hito en el que al lado del Paraná Belgrano hizo jurar lealtad a los soldados que se enfrentaban en batallas. Lo resumió en una frase: «Belgrano fue un hombre grande».
Luego llevando la historia a la realidad actual, recordando que Belgrano quién fuera muy importante para la Nación, murió en la pobreza y que pasó tiempo para que se lo reconociera para ser un inmortal en nuestra historia independentista. Y expresó: “Hablo de una Argentina con desigualdad. Es posible hacer un país distinto y lo debemos hacer nosotros. Belgrano tenía un mérito que fue la creación de escuelas preocupado por la educación”, llamando así a la sociedad a combatir la desigualdad en la Argentina.
En este acto, el Presidnete tomó unos minutos para saludar y conversar con Celina, la niña de Neuquén que le escribió y le dijo que ella hoy cambió un poquito la Argentina haciendo la carta.
Posteriormente Fernández le tomó juramento a las fuerzas del Ejército y la Marina Argentina.
Desde Rosario, en el Monumento a la Bandera lo aguardaban por teleconferencia el gobernador de Santa Fe Omar Perotti, Pablo Javkin intendente de Rosario y otras autoridades provinciales, para entonar el Himno Nacional y cerrar el auto de protocolo nacional.