El Sumo Pontífice autorizó hoy la confirmación del segundo milagro. Será el primer santo nacido y muerto en Argentina.
El papa Francisco aprobó la canonización del cura José Gabriel Brochero, al autorizar la confirmación de su segundo milagro. De esta manera se convertirá en el primer santo nacido y muerto en Argentina.
El primer milagro que significó la beatificación del cura fue el de Nicolás, un niño que había sufrido un gravísimo accidente que lo había dejado en estado vegetativo. Sus padres se encomendaron al cura gaucho y el niño se recuperó asombrosamente. En cuanto al segundo, involucró a una niña sanjuanina que había quedado al borde de la muerte, aprobado por el Vaticano el pasado 12 de enero. En septiembre del año pasado una junta de siete médicos determinó la no existencia de explicación científica que acredite la recuperación de Camila Brusotti, una niña recuperada de múltiples heridas que derivaron en un infarto masivo cerebral.
Según fuentes de la Santa Sede consultadas por Télam, existe una gran posibilidad de que la canonización que lo oficializará como santo se concrete en el mes de octubre en Roma.
