A nueve días del inicio del Rally Dakar 2018, nuestros representantes partieron a las 4 de la mañana del día jueves rumbo a Perú, donde el 6 de enero comienza una la carrera más difícil del mundo.

Encabeza el equipo local el piloto José “Pipo” Blangino, su navegante Fernando Acosta y lo completan Daniel Dinotto y Nicolás Pacheco.

Hacen el viaje por tierra entre Monte Cristo y Lima, como tantos otros latinoamericanos que deben llegar a tiempo a la capital peruana para las verificaciones previas.

Pipo, debutó en la pasada edición con su “Rastro-Dakar” y se ganó el cariño de la gente.

Con un potente motor de Chevrolet Camaro con 350 caballos (V8, 6.2 litros), el noble Rastrojero amarillo, piloteado por el representante de Monte Cristo, tiene con qué cubrir los 9500 kilómetros que le esperan, de los cuales la mitad serán a velocidad libre.

«Hay que ver cómo la gente nos alienta en la ruta. Los argentinos saben bien de qué se trata y a muchos les trae gratos recuerdos; en cambio, a los europeos que corren, por ejemplo, les resulta extraño, no saben bien qué vehículo es. ¡Pero lo mismo les resulta simpático!”, contaba Pipo Blangino a Día a Día.

Los nuestros ya hicieron una experiencia similar a fines de 2012, cuando debieron cubrir por primera vez ese periplo en virtud de que el Dakar 2013 unía Lima con Santiago de Chile. Es un viaje de casi tres días, con alrededor de 3500 kilómetros.

Mientras tanto, los protagonistas, para llegar más descansados a la largada, viajan en avión, algunos de manera directa y otros con alguna escala. Como sea, el Dakar Perú-Bolivia-Argentina 2018 los espera.

Y para todos, llegar a Córdoba el 20 de enero es el gran objetivo y la más fuerte motivación.