El conflicto interno de la Cooperativa de Trabajo Confecciones Monte Cristo Limitada, de los ex dueños de la familia Vassallo, comenzó cuando se inició la pandemia en marzo de este año, momento en el que estaban en el cargo de presidenta Beatríz Medrano y la vice era María Rodríguez, que hace tres meses renunciaron tanto a su cargo como a ser parte de la sociedad.

Tras esa renuncia, asume la presidencia quién era secretaria del del Consejo de mando, Laura Sosa, procedimiento que fue informado y aprobado por la Subsecretaría de Cooperativas y Mutuales a través del área de legales, además envió el modelo de acta asignado a la síndica Fabiana López.
Reporte Regional conversó con Sosa y López quienes aportaron los datos sobre la situación del conflicto.

Los socios en su momento lograron cumplir con su reclamo de renuncia de Medrano y la situación se normalizó, hasta que se supo que hubo un faltante de dinero de unas las dos cajas que maneja la cooperativa. Según Sosa hay dos cajas en la sociedad, una caja que corresponde a la recaudación de Akira, que es la marca propia de producción y otra caja que es de la producción que se hace para clientes externos a la cooperativa. La caja del faltante, según esta conducción, era administrada por Medrano y la vocal Cristina Fassi y es la recaudación de Akira.
Ese echo que se catalogó como un robo, fue denunciado a la policía, pero no hubo datos que esclarezcan el hecho ya que la nueva conducción señaló que alguien entró a la oficina sin forzar puertas y las únicas que tenían llaves eran las dos socias que acababan de renunciar.

Posterior a la inicio de la pandemia, la fábrica cerró su producción hasta hace tres meses que retornaron a la actividad y a partir de ahí la relación entre socios se tornó tensa y conflictiva con reclamos a la nueva conducción de la cooperativa.

Los socios reclamaban a la ex vocal Fassi y administradora de Akira que rindiera el balance de esa producción, pero nunca se aclaró y sólo devolvió las carpetas, pero los socios dicen que falta material.
Tras asumir, Laura Sosa no fue señalada por los compañeros por el faltante de dinero en Akira, pero sí comenzaron a presionar por una supuesta falta de información, sin embargo, Sosa aclaró que «la cooperativa siempre estuvo bien, siempre presentamos los balances, el único que falta es el de 2019», que afirmó que ya está hecho y pronto a presentarse.

Desde el lunes, un grupo de socios ha decidido tomar la fábrica y hasta hoy no están trabajando, por lo que la cúpula de mando actual ha ido a la Comisaría local y dijeron que no le tomaron la denuncia por no existir enfrentamiento ni daño físico. Además acudieron al Juez de Paz, que el lunes era feriado judicial, de todas formas se contactaron de manera particular con Walter Romagnoli pero no intercedió y sólo les dijo era un caso para un fiscal.
Al no tener respuesta de los agentes públicos, Laura Sosa acudió finalmente a un escribano, con el que se asentó la acción de la toma y la situación de conflicto que había vivido en el horario de cierre con la vicepresidenta actual, Rosa Padilla y la vocal Evangelina Marcela Algarbe al no querer responsabilizarse de la llave cuando tenían que cerrar la jornada.

La toma de socios con mensajes reclamando la salida de la actual Presidenta

Sosa contó que el día martes se presentó junto al síndico y el actual abogado de la Cooperativa ante la Subsecretaría de Cooperativas de la Provincia y se les notificó que una delegación estaría en el taller el día jueves 19 de noviembre a las 10 de la mañana.

Desde la Subsecretaría dijeron que vendrán para aclarar los procesos correctos de acción, que se debe esperar a la Asamblea Ordinaria, sin embargo los socios vienen reclamando la Asamblea Extraordinaria.

La síndica Fabiana López, denunció que la toma que realizan los socios «se hizo con violencia, verbal y hasta llegar a intimidarnos porque nos enfrentaban, quisieron entrar a la oficina y sacar los papeles de la oficina con violencia; y eso no se puede hacer»; al tiempo que contó que el grupo de socios que hacen la toma están asesorados con un abogado.
Consultadas por la existencia de una intención política en el conflicto, López fue contundente y expresó: «sí, totalmente. Están siendo manejados de afuera por el abogado y el señor Marcelo Mercante (militante partidario cercano al kirchnerismo)».

Laura Sosa contó que quiso hablar con el doctor Salum, abogado que asesora los socios de la toma según la titular, pero que no ha podido llegar a él y que le comunicaron su negativa de hacerlo.

Los socios han iniciado algunas acciones de principio legal enviando cartas documentos a Laura Sosa y Fabiana López, quienes dicen que las demandas recibidas son totalmente falaces y con falta de argumentos, sin embargo han estado respondiendo a la información.
Los socios reclaman balances de años anteriores que esta nueva conducción afirma que ya han sido aprobados en asamblea incluso por los mismos socios que hoy hacen la toma, además de que también han sido presentados y aprobados por la Subsecretaría de Cooperativas y Mutuales que también entregó el «certificado de subsidencia», por lo que se confirma que la entidad está al día en todo.

Sosa confía en que recibirán nuevamente el respaldo de la Subsecretaría porque ya ha aprobado los balances, que incluso están firmados por el Consejo de Ciencias Económicas.

Ante el pedido de renuncia, Sosa aduce que hay una intención de ese grupo de tomar la conducción de la Cooperativa, sin embargo por estatuto la presidenta actual tiene vigencia en función hasta cumplirse los 3 años, ya que hasta el momento no hay irregularidades afirmaron, sólo un pedido de renuncia de un grupo que para la conducción están manejados políticamente.