Todo sucedió el lunes por la noche, cuando en la dependencia policial se recibe la denuncia de la desaparición de una niña de 13 años.
Se trataba de Agostina Rodríguez quien el lunes por la tarde, tras una discusión familiar con su mamá, se ausentó de su hogar. Tras percatarse de que la niña no volvía, su madre decidió pedir ayuda a la policía.

Rápidamente, tras consultar las circunstancias de contexto, la fuerza puso en marcha el Protocolo Policial de Búsqueda de Personas.
La menor finalmente apareció sana y salva ayer por la tarde. Tras consultar con fuentes oficiales, Diario MonteCristo pudo saber que la niña no se refugió en la casa de ningún familiar, ni amigos; sino que aparentemente se había escondido en la vía pública. No trascendió en qué lugar se habría guarecido para no ser detectada.
Todo indica que tras varias horas afuera, la menor aprovechó un momento en que no había nadie en su casa para regresar a buscar comida. En el transcurso de esa travesía fue encontrada en la vía pública. Para culminar el procedimiento, la justicia interviniente determinó restituir la niña a su mamá nuevamente.
Las Redes
En paralelo al hecho y a toda la investigación, hubo un marcado protagonismo de las redes sociales. A poco de trascender la desaparición de Agostina, una cadena de WhatsApp se viralizó rápidamente. Un audio, que habría salido desde el mismo colegio al que concurre la niña, acompañado de una foto, decía lo siguiente:
Esto se sumó a distintas publicaciones de Facebook que rezaban lo mismo. La noticia corrió como reguero de pólvora por todo el departamento Río Primero, y los comentarios en las redes se multiplicaron. Esto marca la importancia de la comunicación usada responsablemente.