El joven de 21 años, oriundo de Media Luna Sud, se presentó en el Festival de Doma y Folklore con su caballo Indio en la categoría de carreras de tambores y fue el flamante ganador de la noche.


Fabricio Carrara, de 21 años, ha conquistado corazones y pistas de riendas con su fiel compañero, su caballo llamado Indio. Este fin de semana la dupla oriunda de Media Luna Sud se presentó en el Festival de Doma y Folklore de Jesús María representando a Monte Cristo.
A través del Campeonato Cordobés de Carreras de Tambores el joven clasificó para presentarse en la noche del domingo y fue el flamante ganador conquistando el primer lugar en su categoría.
Al respecto Fabricio expresó que «fue una experiencia única, soñada con muchos nervios y ansiedad de ver tanta gente alrededor. Me volví muy feliz».
Además nos contó que se trató de la primera carrera del año y que ahora se prepara para la próxima competencia en la ciudad de Dean Funes, en el norte cordobés, que se realizará el próximo fin de semana.
Por otra parte, el joven se mostró agradecido con el apoyo recibido del intendente de la ciudad Daniel Haniewicz.
En la pista, con su fiel amigo Indio, Fabricio busca dejar una huella y llevar el nombre de su tierra natal a lo más alto, a través de su gran pasión.

Persiguiendo un sueño
Fabricio Carrara recibió de sus padres el obsequio de lo que él considera su tesoro más preciado: su caballo, Indio. Quien se ha convertido en su amigo incondicional y en la razón de sus victorias y alegrías.
En 2022, Fabricio se coronó subcampeón en la categoría juvenil, impulsándolo a participar en competiciones a lo largo y ancho del país. En la final nacional, de ese mismo año, se volvió a destacar y nuevamente obtuvo el título de subcampeón.
El 2023 no fue diferente, participando en las finales del anfiteatro de Jesús María y consolidando su posición como riendero. Ésto le permitió clasificar y meterse en la noche soñada en el Festival donde conquistó la pista y se llevó el triunfo de la noche en su categoría.
Pero en esta historia de desafíos constantes y logros, Fabricio no camina solo. Su familia, especialmente su hermana, lo acompaña domingo tras domingo, a las competencias en distintos lugares, brindándole un apoyo incondicional.