Carta de Lector por Carina Patricia Lattini
«Quiero compartir con todos, una carta que di en propias manos al Padre Rubén.»
Querido Padre Rubén:
Creo que mi saludo ya resume el motivo de la carta. Eso es todo lo que pido. Que el saludo sea “Querido Padre Rubén” y no “De mi mayor Consideración”. Esta es la idea que muchos padres, muchos alumnos, muchos hermanos, muchos abuelos, queremos hacer escuchar.
Es verdad que los tiempos han cambiado y ahora los padres en vez de reprender a sus hijos, se enojan con los maestros. Es verdad que ahora los colegios enfrentan litigios legales. Pero eso no tiene que hacer que perdamos el objetivo de lograr que el Colegio sea un Segundo Hogar. Así como Nuestro Padre no pierde la esperanza en la humanidad y los bebes siguen naciendo. ¡Ese es el ejemplo que debemos tomar!
Queremos un Instituto como lo fue estos casi 50 años. Donde el clima sea de cariño, calidez y comodidad. No de miedo, frialdad y acartonamiento. Reglas si. Normas si. Respeto si. Pero con límites, ubicándonos en el contexto real de la comunidad en la que está inserto el Instituto. El censo dice “Ciudad”. Pero seguimos siendo visceralmente PUEBLO, y estamos orgullosos de eso.
Queremos que, como ha sido estos casi 50 años, como han sido TODAS las autoridades hasta ahora, sepan los nombres de la mayoría de los alumnos. No todos, pero la mitad mas uno se puede. Eso nos indica pertenencia a la comunidad. Vaya media hora a cualquier supermercado y vea como la gente se saluda por el nombre. Parece en vereda cuando termina la misa y escuche como la gente se saluda con el nombre. Camine 4 vueltas al veredón de la Avenida y observe como la gente que camina se saluda por el nombre. ¡ESE ES NUESTRO MONTE CRISTO! Y así queremos que sea NUESTRO INSTITUTO. Que el colegio no se responsabilice por ciertas cosas, pero sí que PARTICIPE.
Queremos que NUESTRO INSTITUTO, siga siendo de la Comunidad de Monte Cristo. Ahora sentimos que se ha transformado en una EMPRESA PRIVADA CON FINES DE LUCRO. Siempre fue, y queremos que lo siga siendo INSTITUTO PARROQUIAL MONTE CRISTO.
LA COMUNIDAD DEBE SENTIRSE PARTE NO VISITA.
Es muy triste, muy penoso ver casi mil niños y adolescentes callados, temerosos, sin coraje para expresarse. El secundario ha sido y DEBE SER el tiempo donde los adolescentes se revelan. La mayoría de las veces protestan sin razón. Pero DEBEN PROTESTAR!!!! Son adolescentes. Que luego consigan, o no consigan lo que piden, porque no corresponde, es otro tema. Pero siempre han protestado y se han revelado. En nuestro Instituto, este año, tuvieron que dar el puntapié los Egresados. Eso me lleva a pensar ¿Por qué no se animan los alumnos de 4to, 5to y 6to? ¡¡¡¡Siempre fueron los que se animaban!!!! ¿Ahora les han podado la casi diría OBLIGACION de actuar como adolescentes? ¿Por qué recurren a la familia, los amigos, los ex alumnos? ¿Por qué no recurren al colegio? ¿O es que SI recurren a los profesores, pero no pueden hacer mas nada? Tengo tantas dudas con respecto a este Instituto Parroquial Monte Cristo de hoy. La sensación de pertenecer a una empresa y no a una comunidad educativa es horrible.
Rubén, sabes que te quiero mucho. Participaba de tus misas mucho antes que fueras asignado a este pueblo. Cuando eras Párroco de La Virgen de la Montaña. Y me da mucha tristeza por vos y por los niños y adolescentes de nuestro pueblo, sentir tu nombre en boca de todos, junto con el de la representante legal. Y aún si no fuera por cariño, es triste por lo que las dos investiduras significan para una comunidad.
El Párroco del Pueblo y la Representante Legal del Parroquial son figuras que deben ser ejemplo para nuestros hijos, y no ser mencionados así.
POR FAVOR, INTERCEDA PARA QUE VUELVA A SER “NUESTRO INSTITUTO”: RECTO PERO CÁLIDO.
CUANDO DUELE LA CABEZA ES MUY DIFÍCIL SENTIRSE BIEN.
“Habría que fomentar en todo caso este interés en las familias y para eso es importante la vinculación entre la escuela y la casa. Para lograrlo nuestras escuelas deben ser auténticas comunidades educativas. El nombre es muy bello, pero es muy difícil de plasmar en la realidad”.
Monseñor Aguer.
Carina Patricia Lattini
DNI 21.514.246 – Tel . 156320752